- Mañana se conmemora el Día Mundial de la Esclerosis Lateral Amiotrófica, una enfermedad que afecta actualmente a cerca de 50 personas en Navarra
El Hospital Universitario de Navarra (HUN) y el centro de investigación biomédica Navarrabiomed han conseguido identificar dos proteínas, sTREM2 y pTDP43, como potenciales biomarcadores en sangre que permitirán mejorar el diagnóstico de la Enfermedad Lateral Amiotrófica (ELA). Los resultados, fruto de la colaboración que mantienen ambos centros desde 2013 para investigar esta enfermedad, han sido publicados recientemente en la revista Brain, Behavior and Immunity.
La ELA es una enfermedad degenerativa de las neuronas motoras, aquellas que controlan el movimiento de la musculatura voluntaria y que afecta sobre todo a personas adultas. Este miércoles se conmemora el Día Mundial de esta dolencia, que afecta actualmente a cerca de 50 personas en Navarra.
En el estudio navarro, realizado gracias a la financiación recibida por Fundación "la Caixa", la Fundación Luzón y la Asociación Navarra de ELA (ANELA), han participado profesionales del grupo de investigación en enfermedades de la neurona motora del HUN, liderado por la doctora Ivonne Jericó Pascual, y de la Unidad de NeuroEpigenética de Navarrabiomed, que dirige la doctora Maite Mendioroz Iriarte.
La investigación se ha realizado con la participación voluntaria de pacientes y personas sanas que han sido reclutadas por la Unidad Multidisciplinar de Neurona Motora del HUN. También se han incorporado muestras de tejido neurológico ‘post mortem’ del Biobanco de Navarrabiomed, que pertenecen a personas que han tramitado en vida la cesión para fomentar la investigación.
Detalle de la investigación
La inflamación del sistema nervioso, conocida como neuroinflamación, está implicada en el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, el Parkinson o la ELA. En este contexto, el equipo del HUN y Navarrabiomed han conseguido identificar TREM2 como uno de los genes clave involucrados en dicho proceso. En concreto, han identificado un aumento significativo de la expresión de TREM2 en la médula espinal. También han observado un aumento de la fracción soluble de dicha proteína (sTREM2) en el líquido cefalorraquídeo y en la sangre de las personas enfermas de ELA.
Debido a que TREM2 es un marcador inespecífico de neuroinflamación y no específicamente de ELA, el equipo también ha analizado los niveles de la proteína pTDP43, uno de los principales marcadores neuronales que sí se asocian directamente a la ELA.
La doctora Jericó incide en la relevancia de la investigación: “La relación entre pTDP43 y sTREM2 permite identificar las huellas moleculares de la ELA en cada paciente, lo cual resulta esperanzador para el avance hacia nuevas dianas terapéuticas. De hecho, en otras enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer, ya están en marcha ensayos clínicos con pacientes para modificar la acción de TREM2”.