El proyecto de I+D Nutri+ ha conseguido desarrollar nuevas soluciones alimenticias que permitirán mejorar la seguridad y la calidad de vida de pacientes con dificultad al tragar o disfagia. Los resultados obtenidos son fruto del trabajo de investigación y desarrollo realizado por un consorcio donde han participado empresas, centros sociosanitarios y agentes del sistema de innovación navarro SINAI. El proyecto ha contado con un presupuesto final de 1.549.084,70 euros, de los que 776.348,15 euros han sido financiados gracias al Departamento de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial a través de la convocatoria de ayudas a proyectos estratégicos de I+D 2020-2022.

En concreto, Nutri+ ha conseguido desarrollar 30 productos destinados a personas con disfagia y ocho platos para dietas de fácil masticación. Estas nuevas gamas van a permitir mejorar la alimentación de estos pacientes, que ven reducidas sus opciones debido a sus limitaciones para ingerir alimentos. De esta forma, conseguirán mejorar su salud, su estado nutricional y, en definitiva, su calidad de vida. Entre otros productos y platos desarrollados, se ha creado una nueva gama de croquetas, platos de pasta, cremas y platos cocinados.

Este desarrollo ha sido elaborado por un consorcio compuesto por centros sociosanitarios, empresas alimentarias y tecnológicas e instituciones. El líder del proyecto ha sido la residencia para mayores DomusVi. La parte sociosanitaria se ha complementado con el Hospital Universitario de Navarra (HUN) y ADACEN (Asociación de Daño Cerebral de Navarra). En el apartado de empresas alimentarias, ha estado presente el grupo IAN, Frisa precocinados, Tutti pasta y Cocuus. Por último, también han estado implicados la Universidad de Navarra, ADItech y el Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria (CNTA).

El tipo de socios incluidos en el consorcio ha proporcionado un enfoque integral y multidisciplinar para conseguir mejorar la calidad de vida de los y las pacientes con disfagia. Esta patología es muy común, ya que puede afectar hasta al 47% de pacientes de edad avanzada hospitalizados y a más del 50% de personas de avanzada edad ingresadas en residencias de mayores. Los y las pacientes que sufren disfagia tienen dificultad para tragar alimentos, lo que puede provocar problemas de asfixia y otras complicaciones como infecciones pulmonares, desnutrición o deshidratación. 
 

El proceso

Para conseguir estos resultados, el proyecto Nutri+ se ha desarrollado en torno a cinco actividades. La primera de ellas ha sido la fase de diseño, donde se han identificado los requisitos y objetivos nutricionales. A continuación, se ha realizado una fase de desarrollo de tecnologías de texturización, para seguir con la incorporación de ingredientes de valor nutricional y funcional. Después se han desarrollado los menús y productos alimentarios y, por último, se ha evaluado la aceptación, funcionalidad y el impacto en los sectores objetivos.

El resultado ha sido 30 productos aptos para personas con disfagia y ocho platos para dietas de fácil masticación. De todos ellos, se ha trabajado en el desarrollo de cuatro productos moldeados (hamburguesa, merluza, piña y guisantes) por tecnología ‘softmimic’, la cual permite conseguir productos con apariencia realista y texturas adaptadas para este tipo de pacientes.

De los 38 platos y productos desarrollados, un total de 25 han sido evaluados sensorialmente por voluntarios y voluntarias con diferentes patologías y problemas de masticación y/o deglución con el objetivo de validar la aceptación de estos platos por la población objetivo. Debido a la alta aceptación de estos nuevos productos, se incluyeron en los menús habituales de personas con disfagia y se evaluó el impacto de esta estrategia alimentaria sobre su calidad de vida, bienestar digestivo y satisfacción con el nuevo menú propuesto.

Después de tres meses de consumo continuado de estos productos, los resultados de la estrategia alimentaria definida mostraron una tendencia de mejora en el estado nutricional, nivel de satisfacción de los voluntarios y, en definitiva, de la calidad de vida de los usuarios participantes del estudio.
 

• Más información: www.navarra.es